La tierra es plana, nada más pesado que un pájaro puede volar y los discos intervertebrales no se pueden regenerar. Estos son algunos de las ideas que en algún momento de la historia han sido aceptadas para más tarde ser rechazadas. La última de ellas todavía está ampliamente aceptada.
En marzo del 2015 tuve un accidente en la zona cervical mientras jugaba con mi hijo Liam en unas colchenetas (!!). Doy gracias que salvé el pescuezo (nunca mejor dicho) y a día de hoy puedo llevar una vida normal. Sin embargo, pasados los primeros días y la alegría inicial por mi suerte empecé a darme cuenta de que me esperaba una larga y dura recuperación.

Selfie tomado por accidente en el hospital…
De entre todas las cosas que he probado para mejorar mi situación (fisioterapia, chiroprácticos, acupuntura, masaje, yoga, ejercicio de todo tipo, calor infrarrojo, artilugios raros que la mayoría descononce, visualización…etc) voy a compartir contigo en este artículo un resumen de lo que más me ha ayudado.
Actualización del 11/11/2018
A día de hoy todos mis síntomas han desaparecido. Lejos quedaron la debilidad, los mareos, los pinchazos en dedos y manos, las arritmias, el dolor constante, el ruido de arenilla en el cuello… y un largo etcétera. Ahora sé que operarme en el futuro, como vaticinó que haría en algún momento el primer médico que me atendió, nunca ocurrirá. Y reconozco que, aunque siempre he creído en la capacidad del cuerpo para sanarse, pasé por algunas épocas de dudas… y pensé en tirar la toalla y plantearme la operación. Ahora estoy seguro de que nunca lo haré.
El proceso entero no tardó menos de 3 años. Te digo esto no para desanimarte, sino para decirte que debes tener paciencia y si realmente te quieres curar, pienso que hoy en día tus posibilidades son altísimas.
Mis primeros días
Tengo un pequeño jardín en mi casa donde con frecuencia paso un buen rato haciendo ejercicios y tonterías varias. Seguramente mis vecinos piensan que tengo un par de tornillos algo sueltos (y algo de razón llevan..jaja). Aunque algunos ejercicos y terapias que realizaba conseguían aliviar mis síntomas temporalmente, los problemas que empecé a experimentar a los pocos días de mi accidente no remitieron durante un largo período de tiempo y algunos incluso empeoraban por momentos.
Mi diagnóstico fue el siguiente: rotura de T1, hiperexensión de varios ligamentos en el cuello y dos discos inflamados. Concretamente mi disco cervical (C5-C6) quedó muy tocado en el accidente y comprimía no sólo los nervios de los brazos y espalda sino también el fluido espinal. Esto me causaba todo tipo de síntomas y debilidad en brazos, espalda y piernas.
Tras investigar infructuosamente (más que nada porque no sabía bien qué buscar) durante bastante tiempo para mejorar mi situación, se me ocurrió un día buscar las palabras “cómo regenerar los discos intervertabrales”. Lo que descubrí ese día en internet es lo que sospechaba, que el enfoque convencional se basa en remediar los síntomas y arreglar con “parches” en lugar de ir a la causa del problema para sanarlo. La “solución” habitual a un disco muy desgastado es una operación de fusión de vértebras. Pero, ¿no sería mejor intentar regenerar el disco intervertebral y evitar la operación? Claro, pero cómo.
Cómo regenerar los discos intervertebrales
El doctor Eric Shapiro fue el primero que me enseñó que realmente los discos sí se pueden regenerar. Sin pensármelo mucho, y tras pedir un préstamo para poder pagar su costoso programa, me apunté para participar en su protocolo no invasivo para la regeneración de discos. Según él (y estoy de acuerdo), todos los tejidos del cuerpo están vivos y pueden regenerarse si se dan las condiciones apropiadas. Cuando una planta se está marchitando la solución no es pintarla de verde sino regarla. Tres veces a la semana iba a su consulta para intentar rehabilitar la capacidad que tienen los discos intervertebrales de absorber agua y nutrientes, regenerarse y recuperar su función normal.
En este estudio (1), por ejemplo, se afirma que los discos se pueden regenerar después de un accidente. En este otro (2) que existe un mecanismo de “bomba” que mantiene los discos nutridos y el tejido funcional. Ése mecanismo de bomba es el que hay que apoyar.
El programa de este doctor consiste básicamente en aplicar presiones variables a los discos, realizar unos ejercicios específicos y seguir unas pautas de dieta y suplementos. Hay que nutrir la planta desde dentro.
La perspectiva convencional de muchos especialistas sobre el cuidado, mantenimiento y regeneración de los discos intervertebrales debe cambiar. La realidad es que la mayoría de intervenciones quirúrgicas son, no sólo arriesgadas, sino innecesarias.
El cuerpo está diseñado para regenerarse
Cuando tuve mi accidente supe que sólo tenía una opción para recuperarme: conseguir ser mi versión más sana por dentro y por fuera. Sabía que sólo si el “terreno” era muy fértil el cuerpo tendría las mejores condiciones para poder realizar sus tareas de reparación. Estoy convencido de que ésta es la base para superar cualquier problema de salud: tener un “terreno” muy saludable.
En cuanto a los problemas de discos intervertebrales, podemos decir que hay dos categorías generales, por un lado aquellos causados por un trauma repentino (como en mi caso) y, por otro, aquellos que se desarrollan poco a poco (la mayoría). Cuando los discos empiezan a perder su morfología ideal, empiezan a poner presión sobre ciertos nervios (dependiendo de la zona) y también en algunos casos sobre la médula espinal (estenosis).
Con mi experiencia me di cuenta de algo muy importante: la fuerza no está en los músculos, sino en los nervios. Cuando “tocas el hardware” como digo yo (o sea, los nervios), los problemas pasan a tener un nivel añadido de complejidad y no basta simplemente con manipular y tratar de fortalecer los músculos.
Quizás te estés preguntando – ¿Por qué pierden los discos intervertebrales su morfología inicial si no es por un accidente?- Pienso que se trata de un problema doble. Por un lado, una disminución metabólica lleva a la degeneración de los discos por falta de hidratación óptima y capacidad regenerativa (por ejemplo, aquellas personas con problemas de absorción digestiva o de tiroides suelen ser candidatos). Por otro, la epidemia de malas posturas contribuye a acelerar la degeneración de estos tejidos. ¿Piensas que trabajar mucho en el ordenador o forzar tu cuello para mirar el móbil no te está dañando tu espalda y cuello? Piénsalo de nuevo.
Sabemos que la capacidad de regeneración de un niño es casi mitológica (de hecho, hay casos constatados de niños pequeños que se cortan la yema del dedo y ésta se regenera). Sin embargo, una persona anciana se cae y con poco se rompe la cadera. La conclusión es obvia: cuanto más apoyemos esta capacidad metabólica-regenerativa del cuerpo mejor será nuestro resultado.
Éstas son las técnicas y ¨trucos¨que pienso tienen más capacidad para ayudarte a sanar tus discos intervertebrales y evitar sus problemas asociados. Sin más preámbulo, vamos al lío:
- Hidratación. Esto es lo MÁS importante. Debes estar bien hidratado porque los discos son como esponjas que absorben agua para incrementar su volumen. Debes beber más agua de lo que normalmente tomas y si no la absorbes bien añadir algo de sal SIN refinar o ácido hialurónico (o ambos) porque hacen que se retenga mejor el agua.
- Movimiento. Los discos intervertebrales no tienen un sistema capilar que les lleve el agua así que dependen del movimiento de los músculos y articulaciones contiguas para recibir su agua. En este sentido el movimiento es medicina. Muévete, cambia de posición todo lo que puedas, no pases más de 15 minutos sentado o en la misma posición. Si bebes suficiente agua pero no ayudas a que se distribuya mediante el movimiento entonces no conseguirás tu objetivo: rehidratar los discos. Un tipo de “movimiento pasivo” son los masajes, si consigues convencer a alguien para que te dé un masaje todos los días (puesto a soñar…) sería también fantástico porque el masaje mueve las estructuras y “alimenta” los discos.
- Nutrición. Los discos no son sólo agua, sino también una serie de tejidos formados por proteínas y polisacáridos. Puesto que realmente no somos lo que comemos sino lo que absorbemos, debes asegurarte de que tu digestión es efectiva y estás absorbiendo tu comida. Te recomiendo que aumentes tu ingesta de aminoácidos con algún suplemento o siendo consciente de hacer una dieta más alta en proteínas. Toma enzimas digestivas y sigue mis recomendaciones para tener una mejor digestión. Consigue si puedes gel de Aloe vera y añádelo a tus batidos (o donde gustes) con frecuencia porque sus cadenas de polisacáridos son parecidas a los tejidos del disco, además también hará que mejore tu absorción intestinal.
INFORMACIÓN EXTRA SOBRE LA DIETA
Recientemente un lector me mandó este email: “…y conseguí superar la espondilitis anquilosante. Todo ello debido a una dieta que nos recomendó un especialista en reumatología que dio una conferencia en la Asociación aportando datos sobre un alimento que no debíamos tomar nunca: el almidón ya que era lo que mantenía un grupo de bacterias causantes de la enfermedad. Es una dieta difícil de seguir porque debes eliminar el pan, los cereales, las legumbres, etc. “Este email me pareció muy interesante, así que investigué más sobre el tema y descubrí que efectivamente existe una correlación elevado entre el consumo de almidón y la aparición en el colon de una bacteria llamada Klebsiella pneumoniae (estudio). Cuando los niveles de esta bacteria son elevados (por el consumo de almidón), y si existe también porosidad en el intestino (algo frecuente) se puede desarrollar un tipo de autoinmunidad que ataca los discos de la columna. Yo tuve un accidente, pero muchas personas que leen este artículo no y simplemente desarrollaron este problema poco a poco. En cualquiera de los dos casos te recomiendo que sigas este tipo de dieta para mejorar tu colón, reducir la inflamación y posiblemente mejorar tus discos SI tienes algo de autoinmunidad. Elena Wagner era una deportista de élite que acabó en la silla de ruedas por este tipo de problema, hoy día disfruta de una vida normal gracias a una dieta sin almidón, gluten ni lactosa. Te recomiendo su libro Comer Sano Para Vivir Mejor
- Reduce tu inflamación con mi “tónico antiinflamatorio.” Es bueno, bonito y barato.
- Necesitas comprar cristales de MSM (metil-sulfonil-metano), un compuesto de azufre orgánico. El MSM que se vende normalmente en tiendas no es prácticamente efectivo porque viene con algunos aditivos (como sílice…etc.). El MSM es muy seguro de tomar, fundamental en la reparación de tejidos y un gran aliado también en muchos otros procesos (detox…etc.), pero debes encontrar una marca de cristales de MSM sin ningún otro aditivo. En mi tienda online tienes un ejemplo de MSM puro. Un suplemento de sulfato de glucosamina (no clorhidrato de glucosamina) es también muy recomendable.
- Vitamina C. Fundamental en la reparación de tejidos. Tengo un artículo entero dedicado a explicar lo que es la auténtica vitamina C y lo que no lo es (ácido ascórbico). Puedes leerlo aquí.
- Tomar un suplemente de colágeno también es muy recomendable porque no sólo ayuda en la regeneración de tejidos sino también en el control de los procesos inflamatorios por su elevado contenido en el aminoácido glicina. Durante mi protocolo con el Dr. Shapiro tomaba un suplemento llamado “Disc Flex” de PureEncapsulations. Puedes tomar ese si lo encuentras en tu país o al menos tomar colágeno normal (probablemente igual de efectivo que “DiscFlex” y más barato).
Técnicas y terapias para regenerar los discos intervertebrales
Aquí te voy a dar sólo algunas, las más seguras y efectivas en mi opinión. Estoy convencido de que algunas de estas técnicas pueden usarse en muchos otros tejidos del cuerpo también con éxito.
- Hidrotomía percutánea. Se trata de hidratar el disco con inyecciones de agua marina ISOTÓNICA (marca Quinton es recomendable) y en algunos casos otros elementos añadidos (vitaminas, antiinflamatorios..etc.). En lugar de hidratar el disco de forma indirecta bebiendo agua y moviéndonos con regularidad, se fuerza la hidratación de forma exógena. Por desgracia, hay muy pocos practicantes de esta técnica pero pienso que es MUY efectiva y segura. Puedes informarte mejor y encuentrar un especialista en su web oficial: http://www.hydrotomiepercutanee.com/es/ Yo sólo pude hacerme 3 sesiones y lo noté muchísimo. Muy recomendable.
- Tratamientos con plaquetas (su efectividad está en cuestión) y su versión más potente de células madre. Las células madre son el futuro porque son capaces de regenerar casi cualquier tejido. El problema actual es que está al alcance de muy pocos por su precio actual y porque todavía no se ha desarrollado un buen sistema para que estas células madre se fijen a la zona donde más se necesitan (al menos en lo relativo a discos). Creo que en unos pocos años será algo bastante normal y por eso quería mencionarlo. En el siguiente enlace te dejo una técnica muy prometedora que se está estudiando en la Duke University para reparar los discos (nunca pierdas la esperanza, siempre hay cosas nuevas): bioingeniería con discos intervertebrales
- Método Shapiro. Ok este es el método que seguí con el doctor Shapiro…. Sin duda me ayudó, pero si supiese lo que sé ahora no volvería a romper la hucha y pagar $9,000 dólares para hacerlo porque no se requiere nada muy sofisticado o al alcance de muy pocos. Todos podemos hacer una “versión casera” en nuestro hogar. Su sistema consiste básicamente en 2-3 sesiones a la semana (durante 3-4 meses) de 45 minutos. Se empieza la sesión con vibración progresiva (empezando con poquito, ejemplo de plataforma vibratoria
), se sigue con tracciones cervicales (ejemplo de unidad de tracción), entonces se pasa a una máquina de estiramientos supersofisticada (pero que pienso no es algo muy distinto de usar una tabla de inversión
) y se acaba la sesión con más tracciones verticales y por último las vibraciones igual que al principio. El programa hace también mucho hincapié en tomar agua con sal sin refinar por las mañanas y sesiones de frío y calor en la zona afectada justo después de cada terapia. ¿Me ayudó? Mucho. Y estoy agradecido por ello, pero espero que en el futuro este doctor desarrolle una forma de hacerlo más asequible a todo el mundo.
- Prolozono. Ésta es la versión barata y casi tan efectiva como las células madre desarrollada por el doctor Frank Shallenberger. Es básicamente un cóctel de ciertos elementos antiinflamatorios y otros que ayudan a la proliferación de tejido nuevo (proloterapia), combinados con ozono que también ayuda a la regeneración y a mejorar la utilización de oxígeno localmente. Me he puesto 3 inyeccciones y sales de allí como nuevo. Es una técnica que realmente sana, porque va a la causa del problema que es la dificultad por REGENERAR el tejido. Una vez el cuerpo tiene los elementos necesarios es capaz de regenerarse. Altamente recomendado. Es una pena que se encuentra en muy pocos sitios en América del norte y desconozco si en Europa. Enlace a Prolozone.
- El instituto McKenzie tiene un enfoque muy efectivo y a la vez seguro de tratar muchos problemas corporales, incluyendo los relacionados con la espalda y cuello. Puedes buscar sus libros en internet (con ejercicios para hacer en casa) o si tienes la posibilidad buscar un profesional de su red. Aquí tienes su web en España. En el siguiente video te muestro mi ejercicio favorito (para cuello).
- El método Starecta. Éste ha sido mi golpe definitivo al problema de las cervicales. Se trata de un “rectificador” bucal que literalmente te estira (de forma progresiva) creando espacio entre los discos intervertebrales y ayudando además a posicionar la cabeza en su verticalidad neutra, con lo cual las presiones están correctamente repartidas y no sólo se evitan los problemas de mal alineamiento sino también de simetría corporal y facial. Es lo que me ha permitido poder volverme a sentar al ordenador sin problema alguno. Lee más sobre el Rectifier® aquí.
Si yo tuviese que repetir mi proceso otra vez esto es lo que haría: seguiría todas las recomendaciones que te he dado más arriba (sobre nutrición…etc.) y en cuanto a terapias mezclaría la hidrotomía percutánea (si la hay en tu país) con una versión “casera” de las técnicas del Dr. Shapiro (si no puedes hacer todo, pues lo que puedas), los ejercicios McKenzie (libro espalda) y, por supuesto, el rectificador Starecta para mantener la postura y disminuir la presión cervical. Todo lo demás que quieras añadir que no tenga contraindicaciones como acupuntura, masajes, risoterapia, paseos, visualización, natación..etc, también contribuirá a tu mejora. Te aseguro que invertir tu esfuerzo en todo esto merece la pena, y es mucho mejor que la alternativa: más sufrimiento y posible cirujía (¡no gracias!).
Si estás aquí por un problema en tus discos intervertebrales, SÉ lo mal que lo has pasado, te entiendo perfectamente y por eso quiero realmente ayudarte en lo posible. Este es mi mejor intento de hacerlo. Te digo sinceramente que estas técnicas, sobre todo cuando se combinan, tienen gran poder y pueden ayudarte MUCHO.
Finalmente, este artículo se ha convertido con sus más de 200 comentarios en casi un fórum sobre el tema. Te aconsejo que te lo guardes en “Favoritos” y lo releas las veces que necesites para sacarle toda la información que necesites.
También quiero daros a todos las gracias por vuestra participación aquí, la ayuda y el ánimo que os brindáis unos a otros y también por vuestro apoyo a mi proyecto de forma directa (mediante mis programas educativos) o indirecta. Todo esto me mantiene motivado para seguir aprendiendo y compartiendo siempre que pueda con vosotros.
Todos merecemos una vida con mayúsculas y una salud a prueba de bombas, pero a veces las cosas necesitan un proceso. Deseo que el tuyo sea lo más corto posible, pero si no puede ser así, entonces deseo que encuentres la paciencia y la voluntad necesarias para seguir luchando día a día sin perder nunca la esperanza, porque es verdad, el que la sigue la consigue.
¡Un salud-o!